YOKOHAMA, Japón – Como todo en la vida, siempre hay un inicio, y para NISMO, esa línea de salida fue en 1984. Nissan ya contaba con gran experiencia en el mundo del deporte motor, pero fue ese año en el que decidió poner en marcha de forma oficial su rama deportiva, en la que centraría sus esfuerzos de Motorsports proyectando su pasión y emoción por las carreras.
Desde sus inicios, NISMO sacó a relucir todas sus cualidades que durante más de treinta años le han servido para fortalecer la imagen deportiva de Nissan. Las actividades de NISMO no sólo se centraban en los circuitos, también otras disciplinas del deporte motor fueron escenario de sus logros. De este modo, en 1985 el vehículo Nissan Fairlady 300ZX (Z31) consiguió el título de pilotos del Campeonato de Japón de Rallys.
A mediados de los ochenta, NISMO participó en la época dorada del Campeonato Mundial de Rallys con los famosos vehículos Grupo B. En esta era, Nissan 240 RS concluyó su etapa en este campeonato con cuatro podios absolutos.
Tras el paso por los rallys, la marca puso la mira en los campeonatos de resistencia. De este modo, NISMO debutó en las 24 Horas de Le Mans de 1986 con el espectacular Nissan R85V. Pero no fue hasta dos años más tarde cuando debutó el primer auto NISMO desarrollado específicamente paras las 24 Horas de Le Mans, el Nissan R88C.
En 1988, Nissan participó en las 12 Horas de Sebring con Nissan GTP-ZXT 88, convirtiéndose en la primera marca japonesa en hacerlo y al final de esta temporada se alzó con el título IMSA Series.
Antes de redimirse en Le Mans, el Nissan Skyline GT-R R32 logró un sensacional triplete en la categoría de Grupo N de las 24 Horas de Daytona en 1990. Fue precisamente este vehículo con el que Nissan logró tres títulos consecutivos Campeonato de Australia de Turismos, lo que le hizo ganarse el apodo de “Godzilla”.
Los noventa fueron muy productivos para NISMO, tras sus múltiples éxitos en las carreras de resistencia, la marca se centró en los rallys con el cambio de siglo. Tras su paso por la arena del desierto, NISMO volvió a centrar sus esfuerzos en los circuitos para la segunda mitad de la primera década del siglo XXI. En 2006 se puso en marcha el exitoso Programa de Desarrollo de Pilotos de Nissan y en 2008 se presentó el esperado Nissan GT-R (R35) de serie que revolucionó el mercado de los vehículos súper deportivos.
En las temporadas posteriores los títulos en el Súper GT japonés llegaron de forma habitual para NISMO, mientras entraba en una nueva era en la que la innovación era cada vez más importante en sus productos. En los últimos años, NISMO probó suerte en la categoría LMP1 del Campeonato del Mundo de Resistencia con el revolucionario Nissan GT-R LM NISMO, y continuó cosechando éxitos y títulos en los campeonatos GT de todo el mundo con Nissan GT-R NISMO GT3.
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